¿Que es un liderazgo?;¿que es lo que hace grande a un líder?; ¿ se nace o se convierte en líder? son preguntas que aquellos que estudiamos la política nos asechan día y noche. Y mas que nada ahora durante la crisis que vivimos en España, esta pregunta aparece con mucho mas fuerza gracias a que carecemos de uso dirigentes a las alturas de las circunstancias. Tan es así que el pacto social español se ha ido deteriorando paulatinamente durante estos últimos cuatro años, y no ya por el pacto por la Reforma de la Constitución dejando a los ciudadanos bajo la merced de los mercados o por los recortes bestiales que ha sufrido la ciudadanía en forma de sacrificio para satisfacer a Moloch y conseguir la purificación necesaria del "exceso" vivido por los hispanos.
Nos referimos mas bien a la ruptura del propio territorio. Si la situación de Euskadi teníamos que tomarlo con gran delicadeza gracias al ascenso de partidos como Bildu y de Aralar ahora todo el sistema se sacude por la demostración de fuerza en Cataluña durante la diada y las posteriores declaraciones del president Artur Mas.
Esta fatiga mutua de la que habla el President Mas nos dejaría hacer sin embargo una traducción que plasmaría de manera mejor la actitud de CiU actualmente: " La fatiga de CiU con el PP y el PSOE". Es CiU sin duda quien empieza toda esta tanda de recortes en pro del balance fiscal pidiendo al Gobierno Central una sola cosa: El Pacto Fiscal. El no lograr el Estatut plenamente por parte del PSOE y el no conseguir el Pacto Fiscal por parte del PP deja a CiU únicamente la herramienta de la identidad nacional catalana para poner en marcha su proyecto político y económico.
Desde las filas de otros movimientos independentistas como Solidaritart Catalana per la Independencia siempre se ha señalado a CiU como los traidores, como los vendidos al Gobierno central por lo que la apuesta que hace actualmente la directiva de CiU es mas que atrevida e interesantes desde una perspectiva de proyecto soberanista.
Aunque la caverna mediatica del nacionalismo español y de los defensores de la Nación clamen que la independencia de Cataluña seria impensable e inviable económicamente habría que ver con detenimiento estas afirmaciones y posteriormente con un poco de dolor aceptar que es al contrario, una España sin Cataluña es inviable.
El mercado Catalan a diferencia del resto de la península ha ido progresivamente aumentando su valor tanto como marca en el exterior como una economía expansiva y potente. Un ejemplo claro de como la sociedad catalana ha logrado postularse dentro de Europa como una sociedad moderna podemos encontrarla en la presencia cultural de Cataluña en el mundo, por ejemplo sin ir mas lejos en:
y de manera mas clara en la producción de Woody Allen:
Aunque nos parezca una tontería y la película incorpore una serie de elementos de la cultura española, el centro de la trama pone el acento en dos americanas que se enfrentan por decisión propia a la cultura catalana y a vivir una Barcelona cosmopolita. Una imagen hollywoodense muy distinta a la que estamos acostumbrados de cuando se habla de España como en aquella épica escena de Misión Imposible 2 donde un Ethan Hunt (Tom Cruise) se ve inmerso en una situación esperpentica por no decir medieval que caracteriza a la mayor parte del territorio nacional:
Esta diferenciación por parte de la industria cultural nos habla de que ya los mercados hacen una diferenciación cultural de Barcelona como centro neurálgico de la modernidad junto con París, Londres o Berlín dejando al Estado Español en una sintonía con el vecino Portugal.
Los datos económicos, como antes habíamos señalado, teniendo en cuenta la situación de la península y el resto de Europa tampoco son tan malos como podemos ver en el informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadística.
En definitiva cuando Cataluña pide mas y pide una mejora situación el Gobierno Central no se encuentra en condición de negar o no negociar ante lo que es su centro industrial y de expansión cultural pone en riesgo la quiebra de Cataluña con el resto de España y dejaría escapar (por decirlo de alguna manera) al gigante que le ha complementado y apoyado de manera mas efectiva en esta crisis.
La duda de que una Cataluña independiente sea viable o no, en realidad es una pregunta mal elaborada ya que si en España una región ha realizado las gestione pertinentes ha sido esta y la cuestión reside en la capacidad del Estado Español de impulsar a la región en una empresa mucho mas ambiciosa que permitirá tanto a Cataluña como España dar respuesta a la crisis económica que enfrentamos y que promocionaría dentro de la región un sentido de pertenencia a un proyecto en común con y en España.
